El corto body-positive de los estudios Disney ha asustado a sus fans

El cortometraje de animación «Reflection» es un producto en toda regla del actual cambio de paradigma social. En sus 85 años de historia, Disney es el primer estudio que presenta a una protagonista de talla grande. Desde tiempos inmemoriales, sólo los villanos o los extras han sido retratados como gorditos. Al igual que ocurre con la diversidad sexual de los personajes, abordar el tema de la percepción problemática del propio cuerpo es una iniciativa innovadora para la compañía.

En el centro de la historia hay una niña gordita llamada Bianca que sueña con convertirse en una famosa bailarina. Un breve fragmento de la película de animación muestra a Bianca bailando frente a un espejo. En la oscuridad, su reflejo en el espejo se deshace, lo que simboliza la dolorosa percepción de su cuerpo. Pero la chica no desespera y sigue bailando, atravesando la oscuridad en una corriente de luz. En esencia, lucha contra su propio reflejo y acaba triunfando sobre su miedo y sus dudas.

Al conocer a la joven Bianca, el público se sintió conmovido por la cercanía que sentía hacia su historia y su personaje. «¡Es exactamente igual que yo cuando tenía su edad! La misma situación en clase de baile», escribió un usuario de las redes sociales. Y otro comentó: «Ojalá hubiera visto este dibujo animado cuando era más joven. Qué maravilloso que las cosas estén cambiando en el mundo!».

«Reflection» formaba parte de una serie de películas experimentales de los estudios Disney centradas en problemas de percepción corporal y baja autoestima. La dismorfofobia (trastorno en el que una persona está obsesionada con su aspecto) es más frecuente en adolescentes). No es raro que las personas con este trastorno se aíslen deliberadamente de la sociedad para no tener que preocuparse por su propio cuerpo y apariencia.